#69: Ambos eramos niños.

Un vecino, amigo mío de generación arriba, me salvó la vida cuando evitó que un Volkswagen Sedán me atropellara, al sujetar la presilla trasera de mi pantalón con su dedo, (impidiendo así mi avance), justo en el momento en que me bajé de la banqueta y pasaba zumbando el coche.

No hay comentarios:

Publicar un comentario